jueves, 19 de abril de 2018

El talento de los Jazz puede con la experiencia de los Thunder

Segunda jornada de playoffs, en la que nos desplazamos al encuentro disputado en el Chesapeake Energy Arena, de Oklahoma, para el encuentro que enfrentará a los Oklahoma City Thunder y a los Utah Jazz.


El encuentro se lo llevaron los Jazz por 102-95, e igualan la serie 1-1 para volver a Salt Lake City con el factor cancha a favor.
Se esperaba un encuentro parejo, en el que los Oklahoma City Thunder cuentan con el que, para mí, es el factor que va a determinar la serie y comentaré más adelante: la experiencia de su plantilla.

PRIMERA PARTE

El partido comenzó con un toma y daca constante entre ambos equipos, donde Utah mantuvo la ventaja por ser más regular en el apartado ofensivo y la solidez defensiva que les caracteriza.

Uno de los factores determinantes en la ventaja que consiguieron los Jazz fue el rebote. Al final del primer cuarto, Derrick Favors llevaba 9 puntos y 7 rebotes (5 ofensivos), y ni Steven Adams ni Carmelo Anthony podían detenerle en la pintura.

Pese a ello, los OKC, liderados por Paul George y Carmelo Anthony, trataban de mantener el pulso a los Jazz, apretando en defensa y abarcando el juego ofensivo de su equipo.

Especialmente Paul George tiene un toque especial cuando llegamos a la postemporada. Promedia casi 20 puntos y 8 triples por partido en PO, y en el primer partido se fue hasta los 36. Viendo como se desarrollaba el partido, el segundo choque parecía destinado a una nueva actuación estelar del escolta de Los Ángeles, indefendible para Mitchell y Favors.


SEGUNDA PARTE

Tras una primera parte donde la defensa y el juego colectivo de los Utah Jazz mandaba en el marcador (46-53), la segunda se focalizó en un punto: la experiencia de los Thunder.

Con un parcial de 19-0, los de Billy Donovan dieron la vuelta al marcador, y poco les faltó para acabar con el partido. La perseverancia ofensiva de Paul George, con la muñeca caliente se convierte en un auténtico killer y lo demuestra en momentos importantes como éste; los movimientos típicos de Carmelo Anthony, totalmente imparable para la defensa de los Jazz, que comenzaba a aflojar y a quedarse sin ideas ante el acierto de los locales, unido a la aparición en escena del líder Russell Westbrook, comandando el ataque de su equipo, acabo por dar la vuelta a la tortilla y apretando en defensa, dejaban sin ideas a los Jazz, que poco faltó para que bajaran los brazos.

Pero apareció en escena en el momento más importante. El jugador franquicia de los Utah Jazz, Donovan Mitchell, estaba prácticamente desaparecido en el encuentro. Se le notaba desquiciado con la defensa de los Thunder, sintiéndose intimidado por Paul George y Russell Westbrook, sin poder frenar sus ataques.

Pero apareció cuando su equipo le necesitaba. El escolta de los Jazz anotó 13 de sus 28 puntos en el último cuarto. Activó el "modo clutch" y desatascó a su equipo del entramado defensivo de los Thunder. 

Con Steven Adams expulsado por faltas al final del partido, los Jazz dominaban el rebote, otro factor clave para hacerse con el partido (56-46 ganó en rebotes). 

Los Thunder se quedan sin ideas en ataque, gracias en parte a la gran red defensiva montada por los de Quin Snyder, y el rookie Donovan Mitchell se encargó del resto junto a su socio en pista Ricky Rubio, infalible desde la línea exterior y manejando el timón de su equipo (22 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias).

Partido mucho más completo de los Jazz, que a lo largo de un partido, la consistencia juega un papel fundamental, en este caso decidió el partido para los visitantes, llevándose la serie a su cancha para tratar de dar la sorpresa ante los hombres de Westbrook.


CONCLUSIONES DEL PARTIDO

Varias son las resoluciones del choque entre Jazz y Thunder, que probablemente acaben llevando la serie hacia un terreno, que, en mi opinión, va a acabar del lado de los de Oklahoma, especialmente es la experiencia en postemporada de la plantilla de Billy Donovan.

Carmelo Anthony ha tenido 10 apariciones en playoffs en la NBA, además de manera consecutiva (2004-2010 con Denver, 2011-2013 con New York), y es un jugador bastante consagrado en la liga, pese a no haber ganado nunca un anillo, sabe jugar éste tipo de partidos.

Paul George ha jugado 6 temporadas en PO, siendo el líder de Indiana en aquella etapa, y siendo realmente letal en postemporada, sacando su mejor versión.

Y Russell Westbrook lleva 7 temporadas jugando playoffs con los OKC, llegando a unas finales, siendo un hombre bastante curtido en las eliminatorias.

El factor que juega a favor de Utah Jazz es su estilo de juego. Quin Snyder plantea una fluidez en el juego colectivo que hace un baloncesto atractivo, muy similar al de los Celtics de Brad Stevens.

En el otro lado de la cancha, la defensa férrea es una seña de identidad de éstos Jazz, defendiendo con los brazos en alto, tapando líneas de pase, frenando así las transiciones y ataques fluidos y haciendo un juego más estático, donde se sienten cómodos desde el orden y la posición.

 Estamos ante uno de los equipos que más balones roba en la liga, junto a Indiana Pacers, los que utilizan una técnica similar de defender con los brazos en alto para tapar dichas líneas de pase entre los atacantes.

En mi opinión, la experiencia es un factor determinante, que en el tercer cuarto dejó evidencia de la relevancia, además del primer partido de la eliminatoria. Si Oklahoma City Thunder lo emplea adecuadamente, añadiendo solidez en ambos lados de la cancha, para mi deberán pasar de fase a semifinales de conferencia.

Pero delante tienen a uno de los mejores jugadores de la liga, metiendo 27 puntos por partido en la eliminatoria y que venderá bien cara su piel y la de su equipo.



jueves, 5 de abril de 2018

Ha llegado la hora de Sylven Landesberg

En el baloncesto hay diferentes tipos de jugadores que simpatizan con su afición. Jugadores con carisma, anotadores compulsivos, defensores tan impenetrables que parecen muros, "dunkers" que destrozan el aro rival. Aquellos jugadores que provocan nuestra alegría y ganas de saltar del asiento del pabellón para corear su nombre.
Después de casi toda una vida abonado al Club Estudiantes, he visto a jugadores que se han ganado un hueco en nuestros corazones colegiales: Pancho Jasen, Nacho Azofra, Will McDonald, Marlon Garnett, Petar Popovic, Nik Caner-Medley, Diamon Simpson, Nacho Martín, Edwin Jackson, y un largo etcétera.
En la temporada 2017/18, después de 15 de mis 22 años abonado al club del Ramiro, un jugador me ha vuelto a enamorar, nos ha vuelto a enamorar, actuación tras actuación cada domingo, donde lo deja todo para llevar a su equipo a lo más alto posible. No es otro que el hombre de moda en el baloncesto español, Sylven Landesberg.


Origen

La filosofía de vida y los orígenes del alero del Estudiantes le han llevado, ya no sólo a ser el jugador que es, sino la persona que está fuera de las canchas y sin un balón en las manos.

Desde sus abuelos, que lucharon por huir de la Alemania nazi, siendo judíos de origen austríaco y polaco, y de padre neoyorquino, denominado por él mismo como "el típico judío neoyorquino", y su madre procedente de Trinidad y Tobago.
Sylven Landesberg nació en Nueva York en una familia de numerosas nacionalidades en las que el racismo está a la orden del día, y es algo con lo que éste jugador lucha por finalizar. En una entrevista realizada a Movistar plus, Sylven Landesberg muestra la clave que da lugar al racismo: la ignorancia, haciendo ver al mundo lo que está provocando y la manera de erradicarlo.

Nueva York

Nacido el 10 de abril de 1990 en Nueva York, Sylven Landesberg aprendió a ser un jugador fuerte, duro, con carácter y agresivo en ambos lados de la cancha.
Para Landesberg, haber nacido en Nueva York te permite jugar contra rivales que suelen ser más fuertes y con mayor calidad que tú. Vas a aprender lo duro que es conseguir ser el mejor, querrás luchar por ganar cada partido, cada torneo, y pasar por encima de cualquiera.

Landesberg creció en el barrio de Queens, donde se juega uno de los torneos más importantes de Nueva York, donde el slogan es "trae tu juego, no tu nombre". Un torneo que han jugado celebridades como Dwight Howard o LeBron James, y jugadores con menos reputación tratan de humillarte en la cancha, sin importar quien seas y de donde vengas. Es su estilo de vida.

Uno de los factores que provocó que Sylven fichase por el Estudiantes es Omar Cook, pese a que no le conocía personalmente. En más de una ocasión Landesberg cuenta la historia del "sheriff" del Club Estudiantes, afirmando que cuando creció en Nueva York, Omar Cook era un referente para todos aquellos jóvenes que nacieron allí. Se labró un nombre en la ciudad, y cuando oían que Omar estaba en un pabellón, eras consciente de que el recinto iba a estar lleno. 
Según Landesberg, en Nueva York hay una larga tradición de jugadores como Lance Stephenson, Kemba Walker, Lamar Odom, Ron Artest... pero el original era Omar Cook, aquel al que toda la ciudad involucrada en el mundo del baloncesto le respetaba y admiraba.

Maccabi

El neoyorquino llegó a Israel en el año 2010, donde comenzará su andadura profesional. 
Firmó por el Maccabi Haifa,donde llegó a promediar 20.7 puntos y 5.4 rebotes por partido.
Pero no fue hasta 2012, momento en el que es traspasado al Maccabi Tel Aviv, donde comienzan los triunfos colectivos para Landesberg. En 2014 llegó a conquistar la liga israelí y la Euroliga, en la que venció a su actual rival en el derbi de ACB,el Real Madrid.

Un equipo muy sólido tanto en liga como en Euroliga. Un lugar idóneo para sacar tu potencial y diferenciarte para ser uno de los mejores jugadores de Europa. Y ahí llegan los problemas.
Sylven Landesberg ha confesado que el papel que tenía en el Maccabi no era el que deseaba, no quería ser un hombre de segunda unidad. Desde que llegó al conjunto israelí le pusieron en una burbuja, y se sentía atado. Todo el potencial que está demostrando actualmente no podía exponerlo en aquel equipo, se sentía cohibido.
Después de no poder sacar todo el baloncesto que un chico de Nueva York tiene en sus venas, decide salir de ahí, poniendo rumbo a la mejor liga de Europa.



Movistar Estudiantes

Gran parte de culpa de que Sylven Landesberg firmase el pasado verano por Movistar Estudiantes es Nik Caner-Medley, ex-compañero en Maccabi, con el que actualmente guarda una gran relación, siendo como un hermano mayor para él, afirma el alero del conjunto colegial.
Cuando Nik se enteró de la posibilidad de que el Estudiantes estaba interesado en Sylven, no dudó en llamarle para convencerle. 
Es la mejor liga después de la NBA, en un equipo donde será el líder y podrá sacar todo su potencial, que es su principal objetivo, además de ser una gran ciudad donde vivir, además de contar en la plantilla con Omar Cook, base que admiraba desde que era muy joven, le llevaron a decantarse por el Estudiantes y desembarcar en la liga española.
Es en éste equipo donde Sylven Landesberg ha encontrado el ambiente para sacar su mejor versión como jugador de baloncesto, donde se encuentra la base del éxito: la confianza.
El entrenador cree en él, y sus compañeros también, centrando la estrategia del equipo sobre él, buscando el progreso diario, que le llevan a ser el máximo anotador de la Liga Endesa, con 21.2 puntos por partido, y dejando una serie de actuaciones estelares.

Para muchos, incluyéndome entre ellos, veíamos en Sylven Landesberg la oportunidad de ocupar el vacío que dejó en el equipo la temporada pasada Edwin Jackson, máximo anotador y jugador más valorado de la temporada pasada, pese a que no fue elegido como MVP, para mi de manera algo injusta. 
Me preocupaba que se le diese tanta presión a un jugador que comienza su experiencia en España. Pero no sabía lo suficiente de él, está acostumbrado a este tipo de presión, y la confianza en sí mismo hace que sea capaz de canalizarlo.

Sylven Landesberg es un jugador exigente, con ganas de ser mejor jugador cada día que pasa, cada tiro, cada entreno. Gran seguidor de Kobe Bryant, trata de asemejar su mentalidad con la de "La Mamba", para sacar siempre lo mejor de él.

Todos los atributos que hemos analizado de Landesberg han acabado por conocerlas en el mundo entero, después de su actuación el pasado domingo frente al Barcelona Lassa, en la que ganó Movistar Estudiantes por 95-100. En un encuentro para el recuerdo, Sylven anotó 48 puntos (8/11 en triples y 15/22 en tiros de campo), 5 rebotes, 3 asistencias y 9 faltas recibidas para hacer 52 de valoración, lo que le llevó a ser el tercer máximo anotador en un único partido de la historia del Estudiantes y de la ACB.


Fue una actuación que maravilló al mundo del baloncesto, recibiendo elogios de todo el mundo. A todo el mundo le sorprendió, excepto a él.
Hubo un momento, en el tercer cuarto, donde Landesberg falló dos triples en los que Kopponen le hizo falta, y le cambió la mentalidad. Sacó la agresividad con la que se curtió en Nueva York, y le daba igual a quién le pusieras delante, iba a encestar todo aquello que pasara por sus manos.
Todo el trabajo que hay detrás de aquel partido, la confianza en si mismo, el potencial que tiene, y su ambición por ser mejor cada día hacen que Sylven Landesberg sea un jugador que marca la diferencia, y tiene partidos en los que explota como el último, pero que no le sorprenden, sabe hasta donde puede llegar, y ahí esta la clave de todo, que no se pone límites y puede llegar donde se proponga.
Disfrutemos de Sylven Landesberg el tiempo que siga en Movistar Estudiantes, y esperemos, como aficionado colegial, que sean por muchos años.





viernes, 30 de marzo de 2018

Ha nacido una leyenda: Ben Simmons

A lo largo de cada carrera en la NBA, los elegidos en primera posición del draft son los jugadores con mejor proyección entre los menores de 23 años a nivel mundial.
Entre ellos han salido jugadores que han marcado una época en la mejor liga del mundo, que analizaremos posteriormente. Entre ellos destaca uno en la actualidad, al que muchos comparan con nada más y nada menos que LeBron James, y está demostrando sus credenciales para alcanzarlo.
Hablamos del jugador de los Philadelphia Sixers, Benjamin David Simmons.

COMIENZOS

Pese a haber nacido en Australia en 1996, Ben Simmons creció en Newcastle desde que tenía menos de 2 años. En aquella ciudad comenzó a jugar al baloncesto a los 7 años, pese a haber practicado otros deportes, fue a los 15 años, en su vuelta a Melbourne, cuando decidió centrarse exclusivamente al baloncesto.


UNIVERSIDAD

Jugó únicamente un año de universidad, en los Tigers de la Universidad de Luisiana, donde dejó huella, obteniendo diversos galardones a nivel individual, pese a no ganar un campeonato.
Simmons promedió 19.2 puntos, 11.8 rebotes y 4.8 asistencias por partido, siendo el hombre más destacado de su equipo.
Pese a tener una excelente proyección universitaria, decidió dar el salto a la mejor liga del mundo, y se presentó al draft de la NBA.

NBA

Llegó el día 23 de junio de 2016, draft de la NBA. Las futuras estrellas de la mejor liga de baloncesto a nivel mundial se dan cita en el Barclays Center de Brooklyn. Las especulaciones sobre la posición en la que saldrá Ben Simmons parecía clara, y así fue.
En la primera posición del draft del 2016, los Philadelphia 76ers eligen al alero australiano de 2.08 procedente de Australia y de la universidad de Luisiana, Ben Simmons.


Es el tercer jugador australiano en ser elegido número 1 del draft, siendo Andrew Bogut y Kyrie Irving (australiano con pasaporte estadounidense) los primeros en lograrlo.
El alero de los Sixers quedó por delante de otras futuras estrellas de la liga, como Brandon Ingram o Jaylen Brown, jugadores que ocupan todos los focos del futuro de la NBA.
Entonces fue cuando la mala suerte se cebó con el número 1 del draft. Ben Simmons se fracturó el quinto metatarsiano del pie, lesión que le mantuvo fuera de las canchas durante toda la temporada.
Debutó frente a los Wizards en octubre de 2017, y en su primera temporada en la NBA está promediando 15.8 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias, siendo, en mi opinión, el favorito para ser nombrado Rookie Del Año.
Liderando a los Philadelphia 76ers junto a su compañero Joel Embiid, ha conseguido llevar a la franquicia de Pennsylvania a los Playoffs (44-30), después de que el equipo llevase 6 años a la deriva.
La posibilidad de alcanzar el tercer puesto en la conferencia Este es muy real, puesto que se encuentran a medio partido de los Cleveland Cavaliers (45-30).

MEJOR ROOKIE DE LOS ÚLTIMOS AÑOS

Después de la lesión que le mantuvo fuera de las canchas durante su primer año en la NBA, muchas fueron las especulaciones de que Ben Simmons nunca logrará ser lo que promete, un jugador con unas características y un físico que bien le permiten ser comparado con LeBron James y Magic Johnson.
Y es que Ben Simmons no sólo ha demostrado que no estaría a la altura, es que ha pulverizado numerosos registros históricos en la liga.
El rookie de los Sixers lleva 10 triples-dobles en su primera temporada en la NBA, siendo el segundo novato con más triples-dobles en la historia, lejos de los 26 que obtuvo Oscar Robertson en su primer año (26 triples-dobles).
El triple- doble más destacado fue el que obtuvo en la victoria de los 76ers contra los Charlotte Hornets el 20 de marzo. El alero repartió 15 asistencias y 0 pérdidas, algo que no ha conseguido ningún rookie en la historia de la liga. Lo complicado que es repartir 15 asistencias, sin perder un balón, hacen de la actuación de Simmons una de las más destacadas, que quedará para los libros de historia del baloncesto.
Tras su triple-doble frente a los Wolves, Ben Simmons consiguió promediar un triple-doble en un período de siete partidos consecutivos, algo que sólo ha sido capaz de conseguir Oscar Robertson, en su año rookie.

ROOKIE OF THE YEAR

Después del análisis de los numerosos récords que ha batido Ben Simmons en su primer año en la NBA, liderando a su equipo a alcanzar los Playoffs, después de 6 años sin una dirección en la liga, nos lleva a la inevitable conclusión de que debe ser nombrado como Mejor Novato del Año.
Su principal rival por el título, Donovan Mitchell, es uno de los novatos con mayor proyección de la liga. Es el principal arma ofensiva de los Utah Jazz (20.3 puntos por partido, 3.6 rebotes y asistencias por encuentro), llevando a la franquicia a optar por una buena posición para alcanzar la postemporada (8º, 42 victorias-33 derrotas), al igual que Ben Simmons.
Lo que me lleva a afirmar que no hay duda alguna de que el jugador de los Sixers se alzará con el premio a Mejor Novato del Año es su contribución al equipo.
Se encuentra a 2 rebotes y 2 asistencias de promediar un triple-doble durante toda la temporada, algo histórico para cualquier jugador de primer año en la NBA, y ha llevado a su equipo a pelear por el anillo de campeones, liderando "El Proceso" en todos los campos estadísticos.
En cambio, la aportación de Donovan Mitchell es puramente ofensiva, siendo el principal artífice de los puntos de su equipo, siendo escaso el rendimiento en rebotes y asistencias por encuentro.
Uno de los argumentos más utilizados para dar a Donovan Mitchell el premio a Rookie Of the Year es que es el líder de un equipo en formación y que jugará Playoffs con casi total seguridad, y Simmons no. El alero de los Sixers comparte vestuario con Joel Embiid, uno de los jugadores de mayor futuro en la liga, siendo ya uno de los mejores pívots, sino el mejor de la NBA. Mitchell en cambio no tiene un compañero que se encuentre a la altura de lo que es Embiid en los Sixers y pueda disputarle el liderazgo de la franquicia. Por lo tanto, para mi ese argumento no se emplea correctamente.

Para mí no hay ninguna duda, Ben Simmons será galardonado con el premio a Mejor Novato del Año, y será considerado como uno de los mejores "rookies" de la historia de la NBA. El tiempo lo dirá todo, pero después de su primer año en la liga, el interés por verle triunfar en la mejor liga del mundo  es cada vez mayor.
Estamos ante el nacimiento del futuro Rey de la NBA, y su nombre dará mucho de que hablar, él es Ben Simmons, el futuro LeBron James.


lunes, 12 de marzo de 2018

Misión Laker: atraer a LeBron

Madrugada del 12 de marzo de 2018, Staples Center (Los Ángeles). Día en el que se enfrentaron Los Ángeles Lakers contra los Cleveland Cavaliers, donde el morbo está asegurado, después de los últimos rumores que confirman el interés del equipo californiano en adquirir a LeBron James para la temporada 2018/19. El espectáculo estaba asegurado.

                             


Partido marcado por la exhibición de los jóvenes talentos del equipo angelino, dominados por Julius Randle, estableciendo la marca anotadora más alta de su carrera (36 puntos, secundado por 14 rebotes y 7 asistencias) y complementado con Isaiah Thomas (20 puntos, 5 rebotes, 9 asistencias), hicieron del partido un espectáculo ofensivo por parte de los Lakers. 

                            

Un partido más, el equipo de LeBron dejó mucho que desear en el apartado defensivo, (es el cuarto equipo con mayor anotación recibida, con 110.1 puntos, 0.1 menos que el tercero en dicha clasificación, los propios Ángeles Lakers) siendo un auténtico coladero para los angelinos, y no encontraron la manera de cortar la hemorragia anotadora que sufrieron.

Queda plasmada la falta de compenetración de los Cavs, un equipo totalmente renovado tras el "trade deadline", en el que el 23 de Cleveland tira del carro cada noche, pero la falta de química con sus compañeros complica la situación, pese a que, en mi opinión, LeBron hace todo lo posible por que sus compañeros mejoren, es un líder que ejerce como tal.


El encuentro sirvió como un aliciente para aumentar los rumores de traspaso de LeBron James a Los Ángeles Lakers. Las campañas para atraer a la estrella de los Cleveland Cavaliers llegaron hasta situarlo en vallas publicitarias, siguiendo la estrategia que comenzaron los Philadelphia 76ers, y a la que hace alusión, afirmando que "Cleveland y Philadelphia no pueden competir con Los Ángeles".

En la siguiente imagen podemos observar al ex-jugador de la NBA y actual presidente de operaciones de Los Ángeles Lakers, Magic Johnson, conversando con el agente de LeBron James, Rich Paul, durante el partido de anoche en el Staples Center. Conversación que incrementó el rumor del posible traspaso de su cliente a la franquicia angelina.

Mi teoría sobre uno de los posibles traspasos más sonoros de los últimos tiempos en la NBA puede llevarse a cabo, y pequeños detalles abren el debate sobre si ocurrirá.

LeBron James dominó la NBA durante su estancia en los Miami Heat, único equipo en el que ha estado aparte de los Cleveland Cavaliers. En la franquicia de Ohio, en la que comenzó su andadura en la mejor liga del mundo, LeBron obtuvo el único objetivo que buscaba en el equipo: ser el jugador que lleve a los Cleveland Cavaliers a ganar su primer anillo en la NBA, y en la temporada 2015/16 hizo realidad el sueño de todos los seguidores de los Cavs.

Muchas son las personas que opinan que la conferencia este es menos complicada que la oeste, y que es una de las razones por las cuales LeBron ha conseguido llegar a siete finales de la NBA consecutivas.
Cualquier motivo es bueno para tratar de quitarle el mérito a un jugador que, tras 82 partidos de liga regular más Playoffs es capaz de alcanzar año tras año las finales de liga, sin importar el rival.
Los Pacers de Paul George, los Bulls de Rose, los Raptors de DeRozan o los Celtics de Isaiah Thomas, son equipos que se han enfrentado a LeBron a lo largo de los siete últimos Playoffs, siendo doblegados por el equipo del Rey. Equipos con buenos balances y sensaciones durante la liga regular, que a la hora de enfrentarse al 23 de los Cavs vieron como detiene toda esperanza del equipo en alcanzar las finales de conferencia o de la NBA, ya que en Playoffs, sea el año que sea e independientemente de cómo le haya ido la temporada a su equipo, LeBron se transforma durante la postemporada para convertirse en el jugador  al que todo equipo quiere evitar enfrentarse.

Pese a dichas especulaciones, dicho argumento me da la razón en que LeBron recalará en los Lakers, ya que cambiaría de conferencia, y se iría a la que teóricamente es más difícil. Jugará contra los Rockets, Warriors o Spurs antes de las finales, y es un aliciente para él, demostraría que puede derrotarles durante los Playoffs, y así continuar agrandando su leyenda.

Los Ángeles Lakers comenzaron un período de reconstrucción del equipo, que les llevó a las últimas posiciones de la liga durante numerosos años, sobre todo durante la época "post-Pau", cuando consiguieron dos anillos con el pívot español y con Kobe Bryant.
Tras numerosos traspasos y buenas elecciones del draft, aquí están los renovados Lakers: un equipo de jóvenes y futuras estrellas de la liga por la proyección que tienen.

Liderados por Lonzo Ball, Kyle Kuzma y Brandon Ingram, los Lakers están realizando una de las campañas más regulares de los últimos años, situándose en 11ª posición de la conferencia oeste, con 30 victorias y 36 derrotas, y, pese a que tengan un duro calendario en el tramo final de la temporada, pueden acabar con un balance de victorias-derrotas positivo, dato que no consiguen desde la temporada 2012/13, en el que terminaron con 45 victorias y 37 derrotas.
Se trata de un equipo muy atractivo para el futuro, ya que los jugadores anteriormente mencionados no tienen techo en la NBA. Lo están demostrando en la presente temporada, en la que están realizando un baloncesto vistoso y atractivo para los seguidores de éste deporte.
A la actual plantilla hay que añadir un factor de gran relevancia: después del "trade deadline" los Lakers aumentaron su espacio salarial, teniendo la posibilidad económica de incorporar a dos estrellas de la liga, especulándose en gran medida con el nombre del angelino y actual jugador de los Oklahoma City Thunder, Paul George.

Por lo tanto, se trata de un equipo de la conferencia oeste, en la que no ha jugado LeBron, es un equipo joven y talentoso que requiere de veteranía y liderazgo para equilibrar el bloque, y tiene la posibilidad de contratar a otra estrella de la NBA junto a él.
Ya ha conseguido ir a siete finales de manera consecutiva y obtener anillos en la conferencia este, y conseguir el primer título para el equipo de su ciudad natal, los Cleveland Cavaliers, por lo que no tiene más objetivos que pueda alcanzar en dicha conferencia.

En mi opinión son argumentos de gran peso que muestran la teoría por la que LeBron James puede recalar en un equipo atractivo, competitivo e histórico como son Los Ángeles Lakers. El tiempo dirá si llevaba razón y si la siguiente imagen se hará realidad en la temporada 2018/19.
El Rey tiene hambre de nuevos retos y quiere conquistar la conferencia oeste, para así volver a reinar en la NBA.









jueves, 1 de marzo de 2018

Kawhi, en San Antonio te necesitan

Partido de poder a poder entre dos equipos con dinámicas muy diferentes en la NBA. Los San Antonio Spurs han perdido 7 de sus últimos 10 encuentros; en cambio, los New Orleans Pelicans han ganado sus 7 últimos encuentros (con DeMarcus Cousins lesionado). Se preveía un partido correoso entre el cuarto y el sexto clasificado de la conferencia oeste, y así fue.


Vibrante choque que bien podría repetirse en la postemporada, que acabó con victoria de los visitantes, que prolongan su racha de victorias hasta la séptima consecutiva.

Partido muy igualado durante gran parte del choque, donde el equipo texano fue por delante en la gran mayoría del tiempo de juego, pero no supo culminar ante los New Orleans Pelicans que remontaron entre el tercer y último cuarto un choque que daba la sensación de que se les iba a escapar, pero apareció el hombre de moda en la NBA, Anthony Davis (26 puntos, 15 rebotes y 4 tapones), secundado por el director de orquesta Rajon Rondo (13 puntos, 8 rebotes y 12 asistencias) y Jrue Holiday, autor de 25 tantos. Por parte de los Spurs destacamos el gran partido realizado por el argentino Manu Ginobili (17 puntos en la segunda parte), Rudy Gay (19 puntos) y Dejounte Murray (18 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias).
Del encuentro del AT&T Center se pueden sacar numerosas conclusiones con respecto a ambos equipos, y numeraré brevemente nuestras impresiones acerca del mismo:

  1. Sin un jugador franquicia, como es Kawhi Leonard, los Spurs son un equipo que depende de su estilo de juego que impone Gregg Popovich para subsistir sin el alero (seguirá lesionado el resto de la temporada, aunque se especula con su posible retorno a finales de marzo). Carece de la distinción que, por ejemplo, tienen los Pelicans con Anthony Davis, aquel jugador que marque diferencias y decida duelos como el de hoy.
  2. Los jóvenes de San Antonio tienen mucha proyección y son grandes promesas para el futuro de la liga, y, pese a las estadísticas que vemos de Dejounte Murray, están muy verdes. El base y futuro titular de la franquicia falla tiros sencillos o que debería anotar con mayor facilidad. Le falta mucho por aprender al lado de Popovich.
  3. Es indiscutible que Anthony Davis está en nivel MVP y se ha consagrado como el mejor 4 de la liga, pero le falta dominar a equipos de Playoff también, no solamente a medianías en gran parte como los equipos ante los que han obtenido la racha de triunfos que mantienen actualmente. Pese a sus grandes estadísticas del partido de hoy, si que se ha notado la dificultad de anotar y avasallar a su rival cuando la defensa que tiene delante es tan sólida como la de los San Antonio Spurs.
  4. Que San Antonio haya perdido una renta de 15 puntos en el tercer cuarto hasta el final del partido en gran parte viene, aparte de las ausencias de Aldrige y Gasol, y la expulsión del entrenador Gregg Popovich, viene en gran parte por la falta de una referencia en el equipo. Ginobili, Rudy Gay y Tony Parker mantuvieron la renta del equipo en sus rachas durante el partido, pero un partido contra un equipo de Playoff es diferente. Necesitan a Kawhi Leonard, así como los Pelicans a Davis, y por eso se llevaron el partido en nuestra opinión.

La mayor conclusión que sacamos del partido de hoy sobre los San Antonio Spurs,y donde quiero focalizarme, es que necesitan que vuelva Kawhi Leonard ya mismo. El jugador franquicia del conjunto texano es el propio entrenador, Gregg Popovich, y el sistema de ataque colectivo y defensa impenetrable que fomenta es el arma que utilizan los Spurs y que de momento les mantiene en cuarta posición en la conferencia oeste.
La veteranía de Ginobili y Parker ha sido el principal recurso del equipo en el partido de ésta noche. 
Tras la expulsión de Gregg Popovich, Ettore Messina se hizo cargo del equipo, y mantuvo en el banquillo a Tony Parker cuando más estaba rindiendo en el equipo, y dió demasiados minutos a Ginobili, aprovechando el momento en el que estaba durante el partido, pero sin energías. Por último Rudy Gay y Murray trataron de echarse el equipo a las espaldas, pero sin obtener éxito en el intento.



LaMarcus Aldrige y Pau Gasol no pueden ser los referentes de un equipo que aspira con llegar lejos en los Playoffs y en la temporada regular, como llevan haciendo 20 años, ya que la edad y las lesiones lastran a los referentes interiores de los Spurs. La necesidad es mayor teniendo en cuenta que en su equipo se encuentra el, denominado por muchos, mejor jugador defensa-ataque de la NBA y estandarte del futuro de la franquicia de San Antonio.

Por lo tanto, señores de San Antonio Spurs, cuiden a Kawhi Leonard, ya que en sus manos pasa el futuro de la franquicia, y echarle un pulso es lo peor que pueden hacer, ya que pierden más que él, ya que la intención de Leonard no es marcharse, le encanta el equipo texano, pero, si no cuidas lo que tienes, es posible que lo pierdas y no haya vuelta atrás y el futuro de la franquicia pintaría peor sin él.


miércoles, 28 de febrero de 2018

LeBron James: el camino al reinado


Cuando parece que LeBron llega a la cumbre de su reinado, una temporada más se supera, y viene cada noche con una actuación estelar, y anoche se convirtió en único. Consiguió ser el único jugador en la historia de la NBA que ha alcanzado los 30.000 puntos, 8.000 rebotes y 8.000 asistencias.
Ante las cifras y las numerosas muestras de reverencia ante "El Rey", nos ha despertado el interés en mostraros cómo fue el camino de LeBron para convertirse en el Rey de la NBA, ya que no ha sido tan sencilla la vida del 23 de los Cavs, pero ante la adversidad en su vida personal y la pasión por el baloncesto le han hecho llegar a ser uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto.

VIDA PERSONAL

LeBron James nació el 30 de diciembre de 1984 en Akron, Ohio. Su adolescencia fue bastante dura y complicada. 
La madre de LeBron, Gloria James, tenía 16 años cuando éste nació, y su padre se desentendió de él y de su familia, influenciado por su vida personal, siendo un exconvicto.
La abuela de LeBron falleció cuando apenas era un bebé y su madre Gloria le sacó adelante sola.
Los problemas se agravaron, ya que tenían numerosos problemas económicos, y cambiaban de vivienda continuamente, pasando por la mayoría de barrios marginales de la ciudad al sur de Cleveland. La dura infancia de LeBron le hizo un niño tímido y cerrado con los demás, por lo que le costaba socializarse, y encontró en el baloncesto y en el fútbol americano el lugar donde evadirse.



INSTITUTO

Tras un paso por el instituto prácticamente inmaculado, donde destacó por encima de cualquier otro jugador en el torneo estatal, y casi dos temporadas invicto con el instituto, St. Vincent-St. Mary High School, LeBron proporciona un nuevo registro histórico, el de Mejor Jugador de Instituto de 2003, promediando 31.6 puntos, 9.6 rebotes, 4.6 asistencias y 3.4 robos por partido, números nunca vistos en un jugador de su edad.
LeBron James ha sido uno de los últimos casos de jugadores que han pasado directamente del instituto a la NBA sin pasar por la universidad.


NBA

Cleveland Cavaliers

Llegó el día del draft de 2003, y los Cleveland Cavaliers le eligieron en la primera posición. Decidió llevar el dorsal 23 en honor a su ídolo y modelo a seguir en la cancha, Michael Jordan.
En aquel año, LeBron batió varios récords, como el de ser el jugador más joven en anotar 30 y 40 puntos en un partido. 
Terminó su primera temporada en la NBA promediando 20.9 puntos, 5.5 rebotes y 5.9 asistencias por partido, siendo galardonado como Rookie del Año por delante de su mayor rival en aquella temporada, Carmelo Anthony.
James entró en el elenco de Jordan y Oscar Robertson, al alcanzar al menos 20 puntos 5 rebotes y 5 asistencias en su primera temporada en la NBA (posteriormente entró también Tyreke Evans).
Con él, los Cleveland Cavaliers aumentaron en 18 su número de victorias con respecto al año anterior. Se estaba preparando el camino a lo acontecido, el camino del Rey de la NBA.

En la temporada 2004/05 fue llamado para jugar su primer All-Star game, partido que desde aquella temporada no se ha perdido ningún año, otro de los récords de LeBron.
Las estadísticas no pararon de aumentar año tras año, y en la temporada 2005/06 consiguió por primera vez entrar en Playoffs con los Cavs, que no jugaban la postemporada desde 1998.

La siguiente temporada fue también para enmarcar. LeBron consiguió guiar a su equipo a las primeras finales de su historia, después de eliminar en una épica eliminatoria a los conocidos "Bad Boys", los Detroit Pistons. No tuvieron nada que hacer ante los San Antonio Spurs y fueron eliminados por 4-0. 
LeBron estaba dando motivos más que suficientes para que pensaran en él como un jugador que marcaría un antes y un después en la NBA, que con 22 años llevó a unas finales de la NBA a un equipo que dos años antes ni siquiera se clasificaba para Playoffs.

Es un ganador nato. Así se definía y así lo demostraba. Cuando los Orlando Magic eliminaron a los Cavs en la final del Este en la temporada 2008/09, LeBron se fue de la cancha sin felicitar a nadie, y se justificó diciendo que: "no voy a felicitar ni a darle la mano a alguien que me acaba de ganar. Soy competitivo y ganador, para mi no tiene sentido estrecharle la mano a alguien que me ha ganado."

MIAMI HEAT

Llegó un momento clave en la historia de LeBron James en el año 2010/11. Una vez finalizado su contrato con los Cleveland Cavaliers, se convirtió en el agente libre más cotizado de la NBA, y los rumores y espectáculos en torno a cuál podría ser su futuro equipo se hicieron más sonoros que nunca.
Finalmente decide irse a los Miami Heat con su amigo Dwyane Wade y junto a Chris Bosh, formar un "Big Three" que se convirtió en el principal candidato a ganar el anillo. Tuvo que cambiar su dorsal, ya que los Heat retiraron el 23 de Jordan, pese a no haber jugado en Miami, y eligió el 6 de otra de sus referencias, Julius Erving.
Llegaron a las finales tras arrollar a los Boston Celtics y a los Chicago Bulls, y en la final fueron derrotados por los Dallas Mavericks de un imperial y legendario Dirk Nowitzki.

Y el momento de gloria llegó en la temporada 2011/12. Tras la dolorosa derrota en las finales del año pasado, LeBron y sus Miami Heat se volvieron a plantar en las finales, ante los Oklahoma City Thunder de otro "Big Three" formado por un tal Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden. Casi nada. Un equipo que de mantenerse a día de hoy, más de un anillo podrían poseer, pero la precocidad de éste equipo les paso factura. Los Miami Heat ganaron en 5 partidos a los Thunder, donde LeBron promedió 28.6 puntos, 10.2 rebotes y 7.4 asistencias en la serie, llevándose el MVP de las finales.



Tras el gran año de LeBron, muchos pensábamos que estaba llegando a su techo, que pocas cosas le quedaban por hacer, pero nos encontrábamos muy alejados de la realidad.
En la temporada 2012/13, James estableció sus propios récords en tiros de campo, triples y rebotes.
Se convirtió en el jugador más joven en promediar 20.000 puntos, 5.000 rebotes y 5.000 asistencias (dato que ha aumentado ésta misma madrugada, siendo el único en conseguirlo),  y su equipo consiguió la segunda racha de victorias más larga de la historia (27 victorias). 
Tras un año de récord individual y colectivo, ganaron 4-3 en las finales a unos San Antonio Spurs que no pudieron hacer nada, pese a haberle puesto las cosas bastante complicadas, para evitar que "El Rey" obtenga su segundo título de la NBA y de manera consecutiva

Éste equipo es invencible, nadie puede con ellos, no hay ningún equipo que pueda intimidar a los Miami Heat y todos nos preguntábamos hasta dónde puede llegar el legado de LeBron y los Heat.
Pero la historia cambió de protagonista y perdió la final contra los Spurs, y, aunque nadie lo sabía en ese momento, fue la última eliminatoria de LeBron con los Heat.

Regreso a Cleveland Cavaliers

En 2014 LeBron decide dejar los Miami Heat para regresar a la que fue su casa durante 7 años, los Cleveland Cavaliers. Allí se junta con Kevin Love y el hasta ahora líder del equipo, Kyrie Irving.

En el año 2016 LeBron llegaría al cielo de Cleveland, coronándose como el mejor jugador de la historia de la franquicia y héroe, al haber culminado una espectacular remontada en las finales de la NBA frente a los Golden State Warriors de Stephen Curry, y pasaron de ir perdiendo 3-1 a ganar 3-4 y conseguir el primer anillo de la historia de los Cleveland Cavaliers.

En las finales del año pasado perdió contra los Warriors la final, esta vez reforzados con Kevin Durant. Tras ésta final son 7 finales consecutivas que lleva jugando LeBron, desde su primer año en Miami, más la final de su primera etapa en Cleveland son 8 las apariciones que lleva en finales de la NBA, un hecho que le convierte en una auténtica leyenda del baloncesto, ya que tras 82 partidos de liga regular más Playoffs, LeBron te garantiza llegar a la final desde hace 7 temporadas hasta el día de hoy.


Estadísticas y logros personales.

Tras 15 años en la NBA, ha dejado más que demostrado que es "El Rey" de la NBA, y hemos visto que lo ha logrado liderando a cada equipo en el que ha estado cada temporada, teniendo mucho más mérito su trayectoria deportiva.
A continuación dejo unas imágenes de los galardones y estadísticas de LeBron James:


Así es como se construye año a año, día tras día, el camino de un Rey, de un líder, de un ganador, para llegar a ser el mejor jugador de la NBA y uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto. Y no son sólo estadísticas, es el impacto en el juego, la determinación y el don que te diferencia de los demás, lo cual ha ido progresando desde que comenzó en el instituto de St. Vincent-St. Mary High School, donde comenzó su legado en éste deporte hasta su 15ª campaña en la NBA.

¿Quién da por muerto a éstos Cavs donde juega un hombre que es capaz de ganar anillos prácticamente él solo, como el último que consiguió, frente a Golden State Warriors?
LeBron está más vivo que nunca, tiene cuerda para rato, y su carrera está muy lejos de acabar.

Larga vida al Rey.


lunes, 26 de febrero de 2018

"The Process" prospera


Está en camino. "El proceso" en Philadelphia es más real que nunca y así se plasma en el juego y las sensaciones que dejan en la cancha los 76ers liderados por Joel Embiid y Ben Simmons.
Séptimos en la conferencia este, se encuentran más cerca que nunca de volver a jugar los Playoffs y cambiar el rumbo de un equipo a la deriva durante años hasta que la nueva camada de rookies ha desembarcado en la franquicia para llevar a cabo "El Proceso" que ha denominado Joel Embiid a la dirección que toma el equipo para terminar siendo de los punteros en la NBA.

Tras seis temporadas en las que el equipo del este de EEUU ha tratado de reconstruirse, ha sido un proceso bastante largo hasta que hemos comprobado que la reconstrucción está llegando a su fin, y ahora hay que cimentar las bases del equipo.
En la temporada 2011/12 un equipo liderado por Lou Williams, Jrue Holiday, Thaddeus Young, Andre Iguodala, Elton Brand, y había nombres como el rookie en aquel momento Nikola Vucevic o Andrés Nocioni llegó a las semifinales de la conferencia Este, eliminando a los Chicago Bulls, y fueron eliminados por los Boston Celtics en el séptimo y último partido. A partir de ese momento el equipo se fragmentó, traspasos, lesiones y sin ideas claras en la cabeza por parte de la directiva, los Sixers pasaron por un momento complicado tratando de buscar una identidad.


La clave del cambio se encontraba en el draft, donde eligió en el año 2014 en el puesto nº3 a Joel Embiid, pero una lesión entrenando con los Cavaliers el 20 de junio de ese año le apartó de las canchas toda la temporada. Tras ocho meses de lesión, parecía que el momento de liderar los Sixers llegaba para Embiid, hasta que tuvo una recaída en el hueso navicular, y se perdió la siguiente temporada.
En el draft del 2016 pasaba otra de las claves de la reconstrucción, ya que poseían el nº1 y eligieron al que para muchos es el sucesor de Lebron James, Ben Simmons.
Todos los focos estaban puestos en él, por la proyección y habilidades que poseía, la ilusión se palpaba en Philadelphia, pero una vez más la mala suerte se cebó con el equipo, y tuvo una lesión en el quinto metatarsiano que le apartó de la competición toda la temporada.

La temporada 2017/18 es la más importante para la franquicia. Por fin ambos jugadores jugarán juntos (Embiid debutó en la temporada anterior), y cuentan con Markelle Fultz, nº1 del draft del 2018, con el cuál también se han cebado las lesiones y lleva apartado prácticamente toda la temporada por una lesión en el hombro.

Actualmente, los Philadelphia 76ers están en la séptima posición de la conferencia este (32 victorias-26 derrotas) y consolidando la plaza de Playoffs, y visto su calendario hasta el final de la temporada, en la que les faltan 22 partidos por disputar, no sólo tienen opciones de volver a Playoffs después de 5 temporadas sin jugar la post-temporada, sino que tienen opciones reales de quedar entre los 4 primeros puestos y asegurarse la ventaja de campo para la primera eliminatoria.






















A los 76ers les quedan 22 partidos en 8 semanas , teniendo semanas de 5 partidos en ella, y de jugar en algunas ocasiones 3 partidos en 3 días, un calendario muy apretado.
La buena noticia es que sólo les queda una ruta por el oeste, donde jugarán contra Memphis Grizzlies, Minnesota Timberwolves, Denver Nuggets y el partido final frente a Dallas Mavericks. Dos equipos de Playoffs, y dos en las últimas posiciones de la conferencia.
De los 18 partidos del este, juega seis partidos con rivales directos que se encuentran en Playoffs: Miami Heat, Cleveland Cavaliers, Milwaukee Bucks e Indiana Pacers, y un encuentro contra los Detroit Pistons y cuatro frente a los Charlotte Hornets. El resto contra equipos de final de tabla que buscan el "tanking" en busca de buenas posiciones del draft del próximo año.
Actualmente, Philadelphia se encuentra con tres victorias por encima en los puestos de Playoff, y a otras tres victorias del tercer puesto. Calculando de manera hipotética, si son capaces de ganar los partidos únicamente contra equipos que no se encuentren en Playoffs, obtendría 13 victorias más, con un total de 45 victorias y 35 derrotas, suficiente para escalar al menos dos posiciones en la tabla, y teniendo en cuenta el supuesto caso de que no gana a ningún rival de Playoff, que en caso de hacerlo, podría rondar las 50 victorias y las posibilidades de alcanzar la tercera o cuarta plaza son más reales.

Este año, más que los anteriores, donde la mala suerte con las lesiones y la escasez de ideas para establecer un rumbo claro, es el año en el que "El Proceso" debe llevarse a cabo y dar mucho de lo que hablar en éstos Playoff. Los Philadelphia están más vivos que nunca y teniendo una buena plaza, pueden dar más de una sorpresa en las eliminatorias por el campeonato.


domingo, 25 de febrero de 2018

Banquillos que ganan partidos


Y efectivamente, el factor determinante que determinó el partido en gran medida fueron las segundas unidades en un partido de poder a poder entre dos huesos duros de la conferencia oeste. En un partido muy enérgico, con mucha tensión en la que hubo más de una técnica, Kevin Durant (28 puntos y 5 rebotes) y un superlativo Stephen Curry (21 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias), le ganaron el pulso a unos correosos Oklahoma City Thunder que soportó hasta el tercer cuarto, donde un parcial final de 44-13 entre el término del tercer cuarto y el último acabo con el equipo de Billy Donovan.

Un día más en la oficina de Stephen Curry y su séquito, el cual llegaba con unos registros defensivos en declive, y es que en las últimas semanas el equipo dirigido por Steve Kerr encaja actualmente una media de 107,6 puntos por partido, cuando no superaban los 100 antes del mes de febrero.

Comenzaron fríos ambos equipos en el registro anotador, hasta que Durant y Curry entraron en el partido y se fueron con 24 puntos al término del primer cuarto. Los Thunder registraron 22 tiros de campo fallados al término del cuarto, y a raíz de ello, Billy Donovan apuesta por el "small ball" ante la dificultad que tenía su equipo de anotar, y buscar mayor dinamismo en el juego para que Westbrook tenga más espacio para hacer uso del dribbling para atacar y asistir para  tratar de recortar distancias al descanso (52-45).


Se antojaba un partido de alta tensión, y pese a que la relación entre Durant y Westbrook se está apaciguando, el juego duro por el que apuesta Draymond Green (tras la técnica que le sancionaron, se convierte en el jugador de la NBA al que han pitado más técnicas del curso) influía en pilares de los Thunder, como Carmelo Anthony o Paul George, los cuales fueron amonestados con técnica tras varios encontronazos, con Kevin Durant de por medio.

A cada intento de Russell Westbrook de recortar distancias, el equipo de la Bahía respondía con buenos parciales, como el de 7-0 en 1 minuto durante el tercer cuarto y con ataques duros para traspasar las férreas defensas, el dúo que forman Durant-Curry comenzó a desatascar el partido, abriendo un margen de 10 puntos en el marcador.

Entonces apareció el factor que determinó el parcial final y que dejó la amplia distancia que se plasma en el marcador, y fue la segunda unidad de los Warriors.
Nick Young, el hombre que anotó 16 puntos en la segunda mitad para dinamitar a unos incrédulos Thunder que a mitad del tercer cuarto estaban con 6 puntos de desventaja y oportunidades de llevarse el encuentro, y el banquillo determinó el marcador cuando los titulares necesitaban recuperar energías.
Unos Thunder apagados, estableciendo sus peores registros anotadores y de eficiencia en el acierto de cara a canasta (80 puntos y 33% de acierto) de la temporada, añadiendo una defensa prácticamente inexistente y sin capacidad de reacción, permitió que Nick Young se pasease por el Oracle Arena y extendiese la ventaja de unos Golden State Warriors que mantienen el pulso de los aspirantes Houston Rockets de James Harden y no se lo pondrán nada fácil, ya que la química del equipo y la calidad del mismo, unido al toque de Steve Kerr como entrenador y mentor del equipo en general, hace de estos Golden State Warriors un equipo muy difícil de batir, y en mi opinión, firmes candidatos a ganar su segundo anillo de manera consecutiva.




La Barba doma a la manada

Victoria número once de manera consecutiva de unos Houston Rockets que marchan de manera imperial por hacerse con el liderato de la conferencia oeste que en estos instantes comparten con los Golden State Warriors. Enfrente tenían un equipo correoso como los Minnesota Timberwolves que marchan cuartos en el oeste muy parejos a los San Antonio Spurs, terceros de la conferencia.
Tras sus dos primeros encuentros, los texanos endosaron en el primero 17 triples de 39 intentos y en el segundo anotaron 10 triples únicamente en el último cuarto. Por lo tanto, el equipo dirigido por Thibodeau plantearía una defensa más centrada en el tiro exterior, y en mi opinión deberían haber hecho una zona 3-2, dejando algo liberadas las esquinas y es un buen planteamiento para controlar el rebote ante Clint Capela, especialista en dicha estadística.
El encuentro fue dominado prácticamente en todo momento por James Harden, artífice de 31 puntos y 9 asistencias, utilizando una de sus armas más letales, el dribbling, para obligar a moverse a la defensa de los Wolves y abrir espacios, para que sus compañeros tengan libertad para realizar tiros cómodamente, y es uno de los principales focos ofensivos de unos Rockets que pueden acabar la temporada con una estadística única en la historia de la liga, y es la de haber intentado al final de la misma, más tiros desde el triple que desde el interior de la zona.
Los Wolves, dirigidos por Karl-Anthony Towns (18 puntos-13 rebotes) y Andrew Wiggins (21 puntos), comenzaron el partido con soltura, con movimiento de balón buscando espacios que provocaban Twons y Gibson en el interior de la pintura, para que Jimmy Butler y Andrew Wiggins busquen el 1 contra 1 con mayor facilidad.
Al descanso los Rockets se fueron con una ligera ventaja en el marcador (54-55), pero dejando mejores sensaciones que unos Wolves que iban a remolque de los locales.
Mike D'Antoni y los suyos decidieron tras el descanso poner una marcha más, y la solidez defensiva unida al buen juego colectivo en el apartado ofensivo, con mucho movimiento de balón buscando al jugador libre en la línea de tres y con acierto desde el exterior, los Rockets consiguen abrir la brecha que no fueron capaces de cerrar los Wolves, que se estaban yendo del partido sobre todo desde atrás, donde se mostraron muy blandos y frustrados en ataque, donde no fluía el balón y no encontraban manera de meter mano sobre la defensa de los de Texas.
En el último cuarto, tras la lesión de rodilla que sufrió Jimmy Butler, líder de los Wolves, se le acabaron las ideas al equipo de Thibodeau y trataron de tirar del carro Wiggins y el veterano Jamal Crawford (14 puntos), pero de manera muy individual y a un equipo tan rocoso como los Rockets no es suficiente para frenarlos.

























Mi opinión acerca de ambos equipos difiere mucho, si es verdad que el equipo texano se encuentra mucho más consolidado, con las ideas muy claras y con grandes aspiraciones en la liga. En cambio los Wolves se encuentran en el final de su construcción como equipo, y posteriormente comentaré lo que les hace falta para dar ese salto de calidad que le establezca al nivel de los Rockets.
James Harden es actualmente el mejor jugador de la conferencia oeste a mi parecer. Ejerce como líder de un equipo que se ha adaptado a él, juegan como lo establezca y cada uno sabe cuál es su papel y lo asume correctamente. La fluidez ofensiva pasa por las habilidades con el balón del 13 de Houston, en la mayoría de situaciones ofensivas es imparable y su defensor necesita ayuda para tapar los huecos que genera, provocando liberación en sus compañeros, los cuales se quedan tras la línea de tres y con un gran porcentaje de efectividad este año (36.3%). D'Antoni ha dejado claro el modo de juego de su equipo, solidez ofensiva, varias ocasiones en zona y tratando de desplazarse lo menos posible, aprovechándose de las ayudas, y el juego exterior como principal arma ofensiva de un equipo que cuenta con numerosos jugadores especialistas en ese apartado. Conclusión: un equipo que lidera la NBA (45-13) y que ha establecido un "Big three" con Chris Paul-James Harden- Clint Capela, con los que han ganado 28 de 29 partidos en los que han participado juntos. Van a ponerle las cosas muy complicadas a los actuales campeones, los Golden State Warriors.
Los Wolves, en cambio, me dejan un amargo sabor de boca. Equipo blando en el que Wiggins me parece que se siente algo intimidado por la sombra de Butler, cuando deberían aprovecharse como compañeros y junto a Towns establecer su propio "Big three", que de momento les ha llevado a la cuarta posición del oeste. 
Ofensivamente, una diferencia que encuentro entre Harden y Wiggins y que debería reflexionar éste último es que cuando Harden penetra y le defiende más de un jugador, al no tenerlo claro, mueve el balón hacia el compañero desmarcado, en cambio Andrew busca forzar la falta y pocas veces acaba en canasta, no ayuda al movimiento de balón que le falta al equipo.
Los Wolves con Jeff Teague pierden mucho en el puesto de play-maker, no mueve el balón, da pocas asistencias y debe buscar más el juego colectivo más que el individual, fluidez en ataque que evite estancarse como ocurrió sobre todo en la segunda parte frente a los Rockets.
Por último, para que los Wolves den ese salto de calidad que les haría subir un escalón con los mejores de su conferencia, deben focalizarse en tres puntos: Mayor fluidez ofensiva, dar mayor número de asistencias, que se mueva el balón colectivamente y dejar en segundo plano las acciones individuales. Falta solidez defensiva, es un equipo muy blando, y sorprende más teniendo a Thibodeau como entrenador, conocido por la férrea defensa de los equipos por los que ha pasado. Y en último lugar, pero no menos importante, es complicado llegar al punto al que desean con un escaso fondo de armario. La segunda unidad de los Wolves proporciona escaso repertorio para cambiar situaciones negativas del encuentro, y ante la falta de ideas o atasco ofensivo, el banquillo es un elemento crucial que debe revolucionar un partido en esas circunstancias, y en éste partido a Minnesota podría haberle dado oxígeno y darle la vuelta a la situación.
Espero que os haya gustado la crónica y análisis de ambos equipos y nos vemos mañana con un trepidante partido entre los Golden State Warriors y Oklahoma City Thunder, ¿posible final de la conferencia oeste?.
Marcos Antón Riobóo.